Un estudio asegura que los hombres se estresan peligrosamente cuando se encuentran junto a mujeres que les resultan atractivas.
La noticia ha dado la vuelta al mundo y se ha convertido en notición en lugares tan lejanos, como Moscú. Un estudio de la Universidad de Valencia, realizado junto a la Universidad de Groningen (Países Bajos), desvela que la cercanía de una mujer guapa provoca en los hombres una importante subida en los índices de cortisol en apenas cinco minutos. Esta hormona altera el metabolismo celular y es la encargada de generar estrés. Si hay excesos se pueden desarrollar enfermedades como la diabetes o la hipertensión.
Diferentes lecturas del estudio aseguran que pasar tan sólo cinco minutos al lado de una mujer guapa resulta para los hombres igual de estresante que saltar desde un avión, ya que dispara los niveles del cortisol.
¿Cómo se hizo el estudio? Los investigadores de la Universidad de Valencia realizaron una prueba con 84 estudiantes varones que tenían que resolver un sudoku compartiendo una misma sala con dos desconocidos, un hombre o una mujer.
Según los resultados de los análisis de la sangre de los voluntarios, se establecía una relación curiosa entre los niveles de cortisol y la presencia femenina. El índice de cortisol subía si una mujer guapa se encontraba en la sala, y bajaban cuando ella salía. Pero en cuanto la atractiva desconocida regresaba, los niveles de la hormona ascendían.
Los científicos llegaron a la conclusión que ante una mujer guapa, sobre todo si es desconocida, la mayoría de los hombres piensan si intentan ligar con ella.
Casualmente, mientras conocíamos los resultados del este estudio, una belleza internacional, visitaba España. Leighton Meester, reina indiscutible de la serie de moda Gossip Girl, es la nueva imagen de la firma Herbal Essences. La joven actriz de 24 años estuvo en Madrid representando a la marca de productos capilares.
¿Imaginan las toneladas de incontrolable “cortisol” que la it girl dejó a su paso por la capital española?
1 comentarios:
Muy mal. No tenemos la culpa de que no sepan controlarse
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